La revolución no es solo IA: es IA conectada a tu negocio (y sin dramas técnicos)
Categoría
Tecnología
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Todos hablamos de Inteligencia Artificial. Que si ChatGPT, que si Midjourney, que si el primo del cuñado ha montado un chatbot que escribe poesía en japonés. Vale, muy bien. Pero si trabajas en ecommerce y tienes que sacar campañas, productos y promociones cada semana, sabes que eso, así suelto, no te resuelve gran cosa.
La revolución de verdad empieza cuando juntas la IA con herramientas de automatización como Make, Zapier o n8n, y las conectas a tus sistemas reales: tu PIM, tu CMS, tu ERP, tu calendario de campañas, tu herramienta de soporte… Y lo que obtienes ya no es una demo molona para LinkedIn, sino un agente digital útil, escalable y con retorno de inversión claro.
En serio: esto ya está ocurriendo en ecommerce reales. Y en Ebolution lo estamos viendo (y montando) cada vez más. Aquí van unos ejemplos con los que seguro te sentirás identificado:
1. Descripciones de producto que se generan solas (y con SEO)
¿Subes un producto al PIM y luego tienes que perseguir al equipo de contenidos, al de SEO y al de traducción para que quede bonito y subido a tiempo?
Pues imagina esto: automatizas un flujo que detecta el nuevo producto, envía los datos a un modelo de IA con tus directrices de marca y SEO, y te devuelve en minutos un texto optimizado para tu web, marketplaces o catálogo impreso. Sin correos. Sin copia-pega. Sin drama.
2. Integraciones entre sistemas (sin que te sangren por desarrollo)
El clásico: tu ERP y tu CMS no se hablan, el sistema de reviews va por otro lado, y cada cosa que quieres conectar cuesta tres reuniones y medio presupuesto.
Con herramientas como Make y algo de IA, puedes montar integraciones low-code que funcionan. Y que puedes mantener tú, sin depender siempre de desarrollo. ¿Un ejemplo? Cuando entra una review negativa, lanzar automáticamente una acción en el CRM, enviar un email al responsable de producto y dejarlo todo anotado en tu sistema. Eso sí es estar en control.
3. Contenido automático que no parece automático
Tienes una campaña la semana que viene. ¿Qué destacas? ¿Qué producto subes? ¿Qué texto usas?
Ahora imagina que un agente conectado a tu calendario, tus ventas y tu inventario te sugiere ideas, títulos y textos en tu tono de marca. Que te lanza el borrador de la newsletter, del blog o del anuncio. ¿Perfecto al primer intento? No. ¿Un 70% del curro hecho en dos minutos? Sí. Y eso, amigo mío, te da la vida.
4. Atención al cliente 24/7 que no mete la pata
No hablamos de un bot que recita FAQs de memoria. Hablamos de un agente entrenado con tus políticas, tus condiciones y tu forma de hablar, que responde con contexto real: ¿dónde está mi pedido? ¿por qué me han cobrado dos veces? ¿puedo hacer una devolución parcial?
Y lo mejor: si no sabe, no se lo inventa, sino que escala el caso. Eso, en términos de experiencia de cliente, es oro puro.
5. Stock bajo control (sin vigilar el Excel a las 2 de la mañana)
Si se detecta un pico de devoluciones en un producto, o una rotura de stock en una categoría clave, puedes lanzar alertas automáticas, actualizar contenidos en tu web, o incluso ajustar los pedidos a proveedor. Todo sin tener que entrar al ERP en pijama.
IA conectada: útil, barata y pensada para escalar
Lo más bonito de todo esto es que no necesitas ser Amazon para montarlo. No hablamos de proyectos faraónicos ni de presupuestos imposibles. Hablamos de soluciones que ya existen, que se adaptan a tu stack actual y que puedes probar rápido y barato.
Y si te estás preguntando “¿vale, pero cómo lo aplico yo?”, te damos la respuesta más sencilla:
👉 Hablamos. Lo probamos juntos.
Nosotros ponemos el flow, la experiencia y la tecnología.
Tú traes tu negocio.
Y entre los dos, hacemos magia.
